Con todos los respetos pero de los Emiratos Árabes Unidos tenía que venir. Este es uno de los puntos del planeta, con los respetos para Estados Unidos, del que más provienen preparaciones originales y ostentosas. En este caso le ha tocado a un Hummer H2, el arrollador y consumidor todoterreno “lujoso” americano. Demasiado típico el tener un H2, así que darle un toque de maquillaje. Por ejemplo rebanándole el techo.
Y así lo han dejado, con los siete ocupantes que puede llevar a cielo descubierto. Pero no es solamente el recorte de pelo (a la altura de la cuello, como dice mi padre) sino que tiene detalles de otro tipo de tuning. Para empezar, su tapizado interior con una piel de fuerte color rojo, al que siguen a juego unos tribales del exterior. Y para seguir, su propietario/creador ha levantado sobre el capó una original entrada de aire típica de los clásicos muscle car.
Y así lo han dejado, con los siete ocupantes que puede llevar a cielo descubierto. Pero no es solamente el recorte de pelo (a la altura de la cuello, como dice mi padre) sino que tiene detalles de otro tipo de tuning. Para empezar, su tapizado interior con una piel de fuerte color rojo, al que siguen a juego unos tribales del exterior. Y para seguir, su propietario/creador ha levantado sobre el capó una original entrada de aire típica de los clásicos muscle car.
Pero no se trata de un entrada de aire sino de un extra de iluminación pues cuenta con faros
Hella y cubiertas de fibra de vidrio (no vaya a ser que el peso perjudique su rendimiento). Para redondear el asunto han aumentado su aspecto metalizado con unas llantas de aleación, más cromadas y de mayor tamaño, y con unos nuevos apoyos en los laterales. Aunque me imagino que porque las puertas tengan la mitad de tamaño no serán más accesible (o quizás es para subir de un salto al interior).
Lo cierto es que me paro a pensar y si le hubieran cortado el techo de esta manera a un C4 Picasso (por poner un ejemplo) probablemente estaríamos hablando algo más de la originalidad y menos de lo que nos parece un atropello. Deshacer un coche de más lujo duele que otro más accesible, ¿por qué será? Ya es que sólo le faltaba ponerle unas ruedas de carro.
Lo cierto es que me paro a pensar y si le hubieran cortado el techo de esta manera a un C4 Picasso (por poner un ejemplo) probablemente estaríamos hablando algo más de la originalidad y menos de lo que nos parece un atropello. Deshacer un coche de más lujo duele que otro más accesible, ¿por qué será? Ya es que sólo le faltaba ponerle unas ruedas de carro.
