La empresa californiana n2a Motors es la responsable del Anteros Coupe y Anteros Roadster, dos deportivos artesanales basados en el Corvette. La versión coupé se presentó en el Salón de Los Angeles, y ahora la novedad es el roadster, con un aspecto todavía más estilizado y elegante.
Lo cierto es que han conseguido dar unas pinceladas de modelos italianos, ingleses o incluso holandeses (estoy pensando en Spyker) a un deportivo genuinamente americano.
Claro, que la reconversión no es algo ligero como el Corvette de Innotech, la exclusividad se paga, concretamente a 154.500 dólares la versión básica del roadster (5.000 más que el precio anunciado para el coupé).
Como ya habíamos adelantado, la expresión precio desde tiene en este modelo más sentido que nunca: además de las soluciones hechas a medida en interior, colores y demás, la potencia también se pide a la carta, en un rango que parte de los 525 cv y que puede subir hasta más de 1.000.
Un último detalle que generará confianza y comodidad en los compradores (seguro que no muchos): el coche no pierde la garantía, y se pueden realizar las revisiones y el mantenimiento en los concesionarios Corvette.
Lo cierto es que han conseguido dar unas pinceladas de modelos italianos, ingleses o incluso holandeses (estoy pensando en Spyker) a un deportivo genuinamente americano.
Claro, que la reconversión no es algo ligero como el Corvette de Innotech, la exclusividad se paga, concretamente a 154.500 dólares la versión básica del roadster (5.000 más que el precio anunciado para el coupé).
Como ya habíamos adelantado, la expresión precio desde tiene en este modelo más sentido que nunca: además de las soluciones hechas a medida en interior, colores y demás, la potencia también se pide a la carta, en un rango que parte de los 525 cv y que puede subir hasta más de 1.000.
Un último detalle que generará confianza y comodidad en los compradores (seguro que no muchos): el coche no pierde la garantía, y se pueden realizar las revisiones y el mantenimiento en los concesionarios Corvette.
